La soledad regresó por un momento, cerré mis ojos y no estabas, extendí mis brazos y no pude tocarte.
Una lágrima salió, mis ojos se cerraron, pero llegaste a mi rescate. Sentí de nuevo tu piel, respiré tu olor y lo mejor fue que tu sabor llegó de nuevo a mi boca
miércoles, 26 de marzo de 2008
Publicado por
Camila Calles
en
10:50
1 comentarios
Suscribirse a:
Comentarios (Atom)